¿QUÉ SON LAS
"RELACIONES TÓXICAS"?
Se llaman relaciones tóxicas a aquellas que durante o después de
algún encuentro nos dejan "mal", con mal humor, tristes o tan solo
humillados. Son esas interacciones donde por más que queramos siempre
terminamos con el ceño fruncido.
Desde un vecino manipulador,
hasta un jefe con altibajos de humor o una compañera que nos da siempre
"esa mirada.
Y tal vez no lo notes pero cada vez que estás junto a estas personas
"tóxicas" tu nivel de estrés negativo ¡SUBE!
¿CÓMO
NOS AFECTA?
El estrés negativo afecta tu capacidad de muchas
maneras, incluyendo tu trabajo, tu nivel de concentración, tu forma de
comunicarte y hasta puede afectarte el sueño, tu sistema digestivo y tu sistema
inmune.
LOS MITOS DE LAS RELACIONES TÓXICAS.
MITO 1: "Algún día esa persona va a
cambiar"
Este es uno de los mitos más
grandes que existen y que muchos nos aferramos a él. Las personas pueden
cambiar, si y solo si, ellas se lo proponen y deciden hacerlo. Pero eso no está
PARA NADA relacionado con que nosotros los hagamos cambiar.
El proceso de Cambio es INTERNO, y podemos
ponerle mucha voluntad, ganas y energía pero si una persona no está interesada,
no va a cambiar, nunca.
MITO 2: "Eso no me afecta a mí"
"Él es así y eso a mí no me afecta"
o "si ya sé cómo son las cosas pero eso a mí no me toca".
La realidad es que no estamos hechos de acero
y todo lo que pasa a nuestro alrededor tiene un impacto en nosotros, queramos o
no aceptarlo.
Ignorar lo que pasa, cerrar los ojos y seguir
no nos va a llevar a ningún lado diferente del que estamos. Las cosas no van a
cambiar ni a mejorar excepto que decidamos intervenir para ello.
Por eso, no cierres tus ojos y actúes como
"si nada pasa", tampoco te liberará de la mala onda, angustia o
estrés.
Ahora que ya sacamos los "velos" que nos cubrían...
Imagínate:
·
Poder
poner tu energía, foco y atención a las cosas que te importan y te interesan.
·
Sentirte
rodeado de amor y respeto.
·
Levantarte
a la mañana con ganas de empezar un nuevo día, con una sonrisa y lleno de
energía.
· Poder expresar tus pensamientos, opiniones,
comentarios libremente, sintiéndote que te escuchan y te
valoran...
Mediante
ejercicios de relajación puedes conseguirlo.
·
RESPIRACIÓN ABDOMINAL
Esta respiración le ayuda al estudiante a respirar en lugar de contener
el aliento durante la actividad mental enfocada o el ejercicio físico.
Respiración deberá expandir la caja torácica
anterior/posterior, izquierda/derecha y arriba/abajo, incluyendo el abdomen.
Cuando la respiración es superficial, levantando sólo la caja torácica, el
abastecimiento de oxígeno al cerebro es limitado. Cuando uno respira
correctamente hay abundante oxígeno para las funciones cerebrales superiores.
- El estudiante inhala a través de la nariz e
inicialmente limpia los pulmones con una exhalación larga, liberada en cortas
exhalaciones a través de labios fruncidos (puede imaginarse que debe mantener
una pluma flotando).
- La mano descansa sobre la parte baja del
abdomen levantándose en la inhalación y bajando en la exhalación.
- Inhala por la nariz a la cuenta de tres,
mantén la respiración contando mentalmente hasta cuatro y exhala por la boca
lentamente contando de 8 hasta 1. Repite tres veces.
- Para un ritmo alternado inhala por la nariz
por dos y exhala en cuatro sin retener el aire.
- Si arqueas la espalda al exhalar, el aire
hará bajar el diafragma aún más.
·
EL ENERGETIZADOR
Este ejercicio aumenta la
circulación del lóbulo frontal para una mayor comprensión y para el pensamiento
racional. Para relajarse después de un día “duro”.
- Siéntate
cómodamente en tu silla con la cabeza sobre la mesa.
- Pon tus manos sobre
la mesa enfrente de tus hombros con los dedos ligeramente hacia adentro.
- A medida que
inspires, siente tu respiración fluyendo hacia arriba por la línea media como
una fuente de energía, levantando primero la frente, después el cuello, y
finalmente, la parte superior de la espalda.
- El diafragma y el
pecho permanecen abiertos y los hombros relajados.
- El momento de aflojar
es tan importante como el momento de levantar, debes dejar caer la cabeza hacia
el pecho, después baja la frente hasta tocar la mesa.
PRIMER EJERCICIO: EL BÚHO
Libera la tensión de cuello y hombros que se acumulan con el estrés,
especialmente cuando se sostiene un libro pesado o cuando se coordinan los ojos
durante la lectura y otras habilidades de campo
cercano. Además, el búho libera la tensión en el cuello causada por la
subvocalización durante la lectura. Estira los músculos del cuello y de los
hombros restaurando la amplitud de movimiento y circulación sanguínea hacia el
cerebro para un mejoramiento en las habilidades de enfoque, atención y memoria.
- El estudiante aprieta un hombro para liberar
los músculos del cuello que se tensan en respuesta a actividades de escuchar,
pensar o hablar.
- Mueve la cabeza suavemente a través del campo
medio hacia la izquierda y después hacia la derecha, manteniendo la barbilla
nivelada.
- Exhala durante cada una de las posiciones
extendidas de la cabeza hacia la izquierda y después hacia la derecha y después
con la cabeza inclinada hacia adelante para liberar la tensión de los músculos
de la parte posterior. El búho se repite luego con el otro hombro.
- Con cada liberación de aire, la cabeza puede
moverse cada vez más allá dentro de los campos auditivos derecho e izquierdo.
¿CÓMO EMPEZAR? ¿QUÉ HACER PARA "DESCONTAMINAR"
MI AMBIENTE?
PASO 1. Toma
Responsabilidad.
De
Tu Salud, Tu Bienestar y Tu Felicidad.
Nadie es responsable por sacarte una sonrisa o por
ponerte el ceño fruncido, tu eres el que tiene que tomar las medidas para cambiar
tu estado.
Si no lo haces tú, nadie más lo hará por ti. Ya sea
poniendo límites, cambiando tu actitud o tan solo empezando a meditar un poco
cada día, empieza a hacer algo que te haga sentir bien y verás como de a poco
todo empieza a mejorar.
PASO 2. Libera Tu
Estrés, tus angustias.
No
puedes sentirte mejor si estás continuamente bajo presión, triste, deprimido o
ansioso.
Ya
sea meditando al menos 5 minutos diarios, haciendo ejercicio, saliendo a caminar
10 minutos por día o tomando un tiempo para apreciar la naturaleza, tienes que
relajar tu mente. La única forma de sacar lo mejor de ella es cuando aprendes a
relajarla y balancear tu energía.
PASO
3. Pon límites.
Si
puedes, aléjate de esa relación si no puedes, PON LIMITES.
Incluso
si esa persona es tu jefe o parte de tu familia, siempre puedes poner límites.
Ahora,
¿qué significa? Significa ser claro y concreto sobre cómo quieres ser tratado y
que se dirijan a ti.
Por
ejemplo, si tu jefe tiene la costumbre de gritarte cuando algo está mal..
siempre puedes contestarle "No me molestan que me digan qué
hacer o cómo hacerlo, lo que le pido es que lo haga
respetuosamente".
¿Y SI EL TÓXICO SOY
YO?
¿Qué
pasa si al revisar mis relaciones me doy cuenta que la peor y la más dañina es
conmigo mismo?
Primero,
tranquilidad. No siempre podemos ver y medir lo que hacemos y haberte dado cuenta
que tus propias actitudes te están afectando es un GRAN
PASO.
Segundo, fácil, empezar paso a paso a salir de la zona de "eterna queja, víctima
y mal humor". Aquí te dejamos algunas sugerencias:
a.
Haz algo bueno, algo lindo por alguien. La mejor forma de
atraer buenas
"ondas"
a nuestra vida es dando a los demás.
b. Completa la frase
"me siento mejor cuando..." Todos tenemos algo que nos
hace sacar una sonrisa, desde jugar con nuestro perro hasta meditar.
Desde cantar una canción a toda voz en la ducha hasta sonreírle a
un extraño. Encuentra esas "cositas" que te hacen sonreír, y
ponlas en práctica!
c. Acepta y elige...
Si una ráfaga de malhumor, enojo o tristeza te invade, no trates de
ignorarla, eso solo empeorará las cosas. Acéptala y di para ti mismo
"entiendo
lo que me pasa pero en estos momentos elijo no centrarme en esto." E
inmediatamente cambia tus pensamientos hacia algo divertido, algo positivo. Ya
sea desde un video "tonto" en Youtube hasta alguna frase motivacional
o tan solo tomate unos instantes para agradecer que estás vivo y que tienes
posibilidad de elegir tu camino.
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